Categorías: Liderazgo

Liderazgo: por qué necesita irritarse de vez en cuando

Aceptando la fricción o el "irritamiento" en el liderazgo para lograr un brillo organizacional

“Sin fricción no hay brillo”, afirma Pablo Huiskens, Socio principal de N2Growth. Esta profunda declaración resume la esencia del liderazgo dinámico. La fricción, a menudo percibida de forma negativa, es un catalizador del crecimiento y la innovación dentro de los equipos. Pero no se trata sólo de la presencia de fricciones: se trata de cómo se navega, siendo la confianza mutua el elemento crucial.

La dinámica de la confianza y el desacuerdo

La confianza constituye la base de un liderazgo eficaz. Permite a los equipos entablar desacuerdos constructivos sin erosionar los cimientos de sus relaciones. Huiskens enfatiza el equilibrio entre ser “duro con el contenido, suave con la relación”. Este enfoque fomenta el diálogo abierto y la retroalimentación honesta, fomentando un entorno donde las conversaciones desafiantes conducen a resultados positivos.

La delgada línea entre los argumentos ganadores y el crecimiento colaborativo

Los peligros de los escenarios donde todos ganan y pierden

Sin confianza, las discusiones se desvían del contenido constructivo y viran hacia argumentos ganadores. Este cambio de la colaboración a la competencia socava el objetivo central del liderazgo: mejorar colectivamente el desempeño organizacional. Huiskens aboga por centrarse en la mejora conjunta en lugar de en la victoria individual en los debates.

Generar y mantener la confianza: un viaje continuo

La frágil naturaleza de la confianza

Huiskens comenta conmovedoramente: “La confianza va a pie y a caballo”. Esta metáfora resalta la construcción gradual y la rápida erosión de la confianza. Subraya la importancia del esfuerzo continuo para fomentar la confianza dentro de los equipos. Superar los prejuicios personales y centrarse en el respeto mutuo es fundamental para mantener esta confianza.

El papel de la vulnerabilidad y la apertura en el liderazgo

La confianza como base del éxito organizacional

Una cultura de confianza puede parecer "suave", pero es la base de la resiliencia y el éxito de la organización. Huiskens insta a los líderes a reflexionar sobre la dinámica de su equipo en situaciones desafiantes. ¿Se abordan abiertamente estos momentos? ¿Existe una cultura de comprensión y empatía? Esta cultura no sólo fortalece al equipo sino que también impacta positivamente a toda la organización.

Progreso colaborativo: el objetivo final del liderazgo

La sinergia de la confianza y la colaboración

En conclusión, Huiskens reitera la importancia de la fricción en el liderazgo: es necesaria pero debe surgir de un lugar de confianza y respeto mutuo. “Sólo tú vas más rápido; juntos se sale adelante”, señala, enfatizando el valor del esfuerzo colectivo sobre las prisas individuales. Por lo tanto, el liderazgo no se trata sólo de dirigir el barco, sino de hacerlo de manera que cada miembro se sienta confiado, respetado y valorado en sus contribuciones.

N2Growth Global

Deja un comentario